Este mes -además de que suba el IVA salvajemente, lo que no traerá nada bueno a la economía del país- se cumplirán 30 años desde que los norteamericanos W.A.S.P. iniciasen su andadura por los escenarios de la soleada California. Me acuerdo perfectamente de que, cuando me compré su primer y homónimo álbum pensé que eran la nueva gran banda de Los Angeles y que desbancarían a Mötley Crüe, quienes por entonces ya habían sacado un genial Shout at the devil que –sin embargo- no tenía la fuerza de Lawless and company. Después de todos estos años, el tiempo me ha quitado la razón y aunque ambas bandas siguen en activo, la verdad es que –pese a los altibajos de la industria, enfermedades, separaciones, sobredosis o estancias en prisión- la carrera les ha funcionado mucho mejor a Sixx, Neil, Mars y Lee que al bueno de Blackie y los múltiples músicos que han pasado por W.A.S.P. Aún así, es de aplaudir que con la que está cayendo este tipo continúe haciendo giras. Sea como sea, estos White, Anglo-Saxon and Protestant -o We Are Sexual Perverts, como aseguraban Tipper Gore y los gilipollas del PMRC- merecen un espacio en la historia del hard rock y –por supuesto- en este blog. Os acompaño su primer elepé enterito y una interpretación en directo en su primera gira por Europa del tema Animal (fuck like a beast), el que fue primer single de la banda y que luego se dejó fuera del álbum por miedo a la reacción de las tiendas.
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