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Y esta es Cindy Workman, una artista neoyorquina formada entre la The State University of New York y la londinense Chelsea School of Art que en su obra basada en el collage digital realiza bizarras composiciones que incorporan dibujos infantiles, antiguas fotografías pornográficas o diagramas matemáticos.
Mi primera entrada del día es para el moscovita Kirill Borgia, con más de tres décadas a sus espaldas dedicadas a la fotografía erótica. No puedo deciros mucho más.
Y sin abandonar la península con forma de bota, entro en un nuevo fin de semana con Federico Bebber, un artista de Udine que se dedica a la creación digital desde hace más de veinte años, inspirado en las películas de horror de serie B y el trabajo de Dave McKean o HR Giger.
Sigo en Italia como ayer y le dedico el jueves a Matteo Bevilacqua, un fotógrafo veneciano autodidacta con un talento enorme que reside actualmente en Murano y trabaja en el ámbito del retrato y la moda con una aproximación extremadamente artística.
Y hoy le toca al artista italiano Agostino Arrivabene, un pintor, dibujante y escultor de Rivolta d’Adda de la fantástica cosecha del 67 (ese año lo petamos). Establecido en Gradella di Pandino, buena parte de su obra consta en colecciones públicas y privadas de Milán, Pescara, Cagliari, Mónaco, Frankfurt o Gruyére.
