The girl from The Naked Eye

Hoy comienzo mi sesión cinéfila con The girl from The Naked Eye –el título toma su nombre de un local de strippers-, el segundo largometraje del realizador David Ren, un tipo nacido en Shanghai que creció en Queens. La cinta nos cuenta la historia de Jake, un joven ex-alcohólico con deudas de juego, que para saldar las mismas aceptó un trabajo como chófer y protector de las chicas de un proxeneta llamado Simon. Una noche tres meses más tarde Jake se encuentra a su amiga Sandy –joven de Springfield escapada de casa que había acabado trabajando para Simon como stripper y prostituta- asesinada. Entonces decide iniciar una investigación por su cuenta –mientras la policía le tiene como principal sospechoso de la muerte de Sandy- para averiguar quienes son los autores de la muerte de la chica y castigarles.

Estéticamente atractiva, The girl from The Naked Eye es la historia de dos almas gemelas, dos personas vendiendo su cuerpo –aunque de diferente manera- que se odian por ello, luces de neón, mamporros, chicas semidesnudas, sexo, violencia, muchos cigarrillos, calles oscuras, tipos malos sin escrúpulos, disparos... y la aparición efímera de Sasha Grey en una de esas colaboraciones con las que pretende labrarse un futuro en el cine mainstream alejada del estatus de pornstar del que disfruta. En definitiva, The girl from The Naked Eye es un comic en movimiento –que no creo que llegue a nuestro país si no es directamente en el mercado del DVD- para disfrutar junto a un refresco king-size, un gran bol de palomitas y la estufa bien cerca. Amena y de factura aceptable, poco más.