Amiguitos, este fantástico pintor no es otro que Till Rabus, uno de los regalos que a veces me hace la piltrafilla Klimtbalan, buena conocedora –aunque en ocasiones aún la sorprendo- de mis eclécticos gustos en el campo de la imagen. Esta vez, con el arte de este suizo que me ha parecido sencillamente genial, ha acertado de pleno.
3 comentarios:
De verdad que yo le regalé eso?? Pues acerté, en su blog queda que ni "pintado".
Y es muy bueno!
Pues aún me queda algún souvenir que otro de su parte.
Salu2 a ambos mecenas de los mis ojos.
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