martes, 22 de julio de 2008

Pamela Anderson


Sí amiguitos, he tardado pero al final le he hecho justicia. Hace su aparición en este espacio el mito sexual de los 90, Pamela Anderson. La canadiense –que nació el mismo año que artistas de la talla de Dave Navarro o este que os escribe, je, je- aparecía en todas las revistas masculinas de la época. Qué digo masculinas, si hasta salía en Kerrang! y Metal Hammer (y os juro que tengo unos recortes de cuando apareció en el ¡Hola! en un par de ocasiones, presentando en Cannes su película Barbwire y en un juicio contra su ex-marido, el ínclito Tommy Lee). De acuerdo con la biografía de su propia página web, la historia de Pam –los amigos la llamamos así- se resume de la siguiente manera:
Protagoniza una campaña publicitaria de la cerveza Labatt, aparece en Playboy –hasta 11 veces será portada de la revista, ahí es nada-, se la ve haciendo pequeños papeles en series de TV sin importancia, consigue un papel en la sitcom de la ABC Home Improvement y dos temporadas más tarde salta a la serie Baywatch.
Ya convertida en estrella, protagoniza la película Barbwire y produce la serie VIP. Ha hecho más cosas, pero lo cierto es que a Pam siempre se la recordará por sus apariciones en Playboy y por ser la ex-esposa del batería de Mötley Crüe, de quien se divorció tras dos hijos en común y un tormentoso matrimonio que incluyó el rodaje de una película pornográfica casera y su -¿inexplicable?- difusión por internet.
Hace unos años, Pam se casó con el rockero Kid Rock –y os juro que volvió a salir en el ¡Hola! en un reportaje a bordo de un yate en el que estaba incluso el repelente Lars Ulrich de Metallica-, pero a los cuatro meses de la boda se divorció. En la actualidad, la actriz y modelo ha sido diagnosticada de hepatitis C, enfermedad de la que al parecer se contagió después de compartir con su marido una aguja de tatuar. Pam dedica gran parte de su tiempo a colaborar con entidades como PETA, por los derechos de los animales, o a favor de la erradicación del SIDA.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Coño!
Te sigo siguiendo en tu “vacilada” con el danes.
No lo termino de ver claro, cuando he tenido un problema de este tipo, los dueños del trabajo copiado o pegado, se han puesto en contacto de frente, sin ambages.
¡Flipo en colores!
Utilizando la bola, creo que los tiros podrina ir por alguna de estas imágenes, que creo haber visto en tu blog:
imagen 1
imagen 2
Macho, cuidate.
Salu2