The interview

Pues sí, piltrafillas, ya está aquí –antes de su estreno en nuestro país, programado para el próximo 6 de febrero- la película del año. O, al menos, la que ha hecho más ruido. Me estoy refiriendo a The interview, la producción de Sony que provocó una crisis diplomática entre Corea del Norte y Estados Unidos después de que la mencionada productora sufriese un ataque cibernético...¿o no fue así?. Quiero decir, uno ya está tan acostumbrado a que le engañen que me he convertido en un escéptico. ¿Habrá sido todo una maniobra para poner en las primeras páginas de la prensa mundial una comedia de humor grueso y cafre, una enorme campaña publicitaria de dimensiones globales?, ¿estaremos ante una nueva alianza entre la CIA y Hollywood –os suena Argo- para presentarnos a Kim Jong-un como un nuevo Sadam Husein o Muamar el Gadafi a quien poder patear el culo en nombre de la seguridad nacional? En fin, que si atendemos a la versión oficial, después de que el propio presidente Obama interviniese para hacer cambiar de idea a los directivos de Sony Pictures –que habían anunciado que la película no se estrenaría en respuesta a las amenazas recibidas de parte de unos hackers de origen desconocido-, a finales del año pasado se estrenó en los Estados Unidos la esperada The interview, cinta escrita y dirigida por Evan Goldberg y Seth Rogen –responsables de anteriores películas que en España se titularon Superfumados o Supersalidos, con eso os podéis hacer una idea del tipo de humor que baraja este par- y protagonizada por James Franco y el mismo Rogen. 

La primera escena de The interview muestra a una adorable niñita de Corea del Norte cantando pestes sobre Norteamérica mientras los noticiarios occidentales califican a Kim Jong-un de moderno Hitler, joven, inexperto y con ambiciones nucleares. Luego, la presentación de Dave Skylark y su late night televisivo –con cameos de Eminem o Rob Lowe- es bastante graciosa, todo hay que decirlo. Llevamos diez minutos de metraje y, de momento, la cinta promete. Y es que, amiguitos, la historia que The interview cuenta es bastante original. Resulta que Skylark Tonight, el programa presentado por Dave, se ha hecho famoso a causa de unas declaraciones de Eminem –que no desvelaré- y goza de millones de espectadores. Sin embargo, Aaron Rapaport, el mejor amigo de Dave y productor del programa, no está contento. Sus compañeros de profesión no le toman en serio porque, en realidad, Skylark Tonight no deja de ser un cubo de basura, un escaparate de chismorreos. Así, Aaron aspira a dotar de mayor seriedad al programa. Por eso, cuando descubren que ni más ni menos que el líder de Corea del Norte es un seguidor de Skylark Tonight, Dave le propone a su amigo entrevistar a Kim Jong-un. Un mandatario de interés mundial respondiendo a sus preguntas proporcionaría al programa el cambio de rumbo que Aaron estaba esperando. Pero, mientras la pareja está ilusionada con su futuro, tropas de Corea del Norte se dirigen hacia una pequeña isla del Pacífico con un misil termonuclear de 15 megatones. Finalmente, el país asiático estará en disposición de llevar a cabo las amenazas que su líder ha proferido contra los Estados Unidos durante los ultimos tiempos, así que la CIA contacta con Aaron y Dave para hacerles un encargo de lo más taxativo: asesinar a Kim Jong-un aprovechando su viaje a Pyongyang. Y eso es The interview, una historia entretenida, a ratos hilarante, pero que no deja de ser una sucesión de gags en los que no falta lenguaje obsceno o referencias sexuales y que pese a funcionar como divertimento palomitero que le dibuja a uno una sonrisa en la cara, banaliza demasiado la figura del dictador y solo rasca la superficie sin ahondar en la situación de la población del país o la magnitud de la amenaza –real- que supone para los Estados Unidos. A lo mejor es que eso era simplemente lo que pretendían sus autores, sin más. Yo os la recomiendo.