Ohigetan

Prosigo con una pequeña selección del impresionante trabajo del ilustrador –supongo que es un pseudónimo- Ohigetan, artista japonés dedicado al hentai (comics pornográficos) y a los doujinshi (fanzines de manga, en su mayoría de temática erótica) del que –dejando a un lado el carácter de su obra- no podemos más que alabar el dominio que demuestra en sus coloridas representaciones de la anatomía femenina. Sin embargo este Ohigetan es un claro ejemplo de la cultura nipona o –particularmente- del tratamiento que se da al sexo en aquel país. Por un lado, el código penal prohíbe que se publique material moralmente perjudicial –es decir, genitales- por lo que a menudo estos se muestran pixelados en las imágenes de internet o en películas de anime y directamente borrados o emborronados en las páginas de los comics. Sin embargo, las historias de temática sexual áltamente explícita en las que las protagonistas son menores –o lo parecen en atención a sus rasgos y su vestimenta- están perfectamente permitidas y son de consumo mayoritario para los lectores japoneses. Contradictoria cultura. Total amiguitos, que me las he visto y me las he deseado para poderos adjuntar imágenes como las que acompaño en las que la línea que separa el erotismo del sexo explícito es bastante delgada. Sin embargo, para los que queráis conocer más ejemplos de la obra de este –repito, fabuloso- ilustrador, aquí encontraréis una galería bastante completa.