Sí piltrafillas, el momento ha llegado. Mañana es 6 de Febrero y aunque casualmente será el día de San Pablo Miki, un martir jesuita japonés asesinado a finales del siglo XVI, no me preguntéis la verdadera razón por la que he decidido –de hecho se me ocurrió hace unas semanas- dedicar la totalidad de mis entradas al país del sol naciente, también conocido como Japón. ¿Podréis aguantar la espera?.
5 comentarios:
Yo puedo esperar tranquilamente, años...
Ja ja ja ja, ¡qué cabrón!
NO, NO PODEMOSSSSS!!!! jejeje!
Acertadísima decisión... me encanta Japón.
Y sin haberlo deseado, me ha salido un pareado.
Supera eso! ja!
Dale caña tio...
Voy a toa hostia...
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