Conejo a la vinagreta

Y como ya hace tiempo que no dedico unas líneas a la cocina, hoy os voy a regalar una nueva entrega de las recetas del rincón del cocinillas erotómano. Este domingo me voy a meter entre pecho y espalda una buena ración de Conejo a la vinagreta. Tomad nota piltrafillas y tened la previsión de cocinar este plato un día o varios antes del que queráis dedicar a su consumición.

Se compra un conejo a trozos –dos muslos, dos paletillas, y cuatro trozos de costillar y riñoneras-, desechando cabeza y vísceras. Se salpimenta, se rocía con zumo de limón y se fríe en aceite caliente hasta que se dore. Hecho esto, se pone en una olla con cebollitas, una cabeza de ajos, dos hojas de laurel, pimienta en grano, más sal, medio vasito de vino blanco, dos vasos de aceite y uno de vinagre... y se cocina a fuego suave durante dos horas. Luego se sacan los trozos de conejo, se cuela el líquido y se reserva todo junto en un recipiente de cristal hasta el momento de degustarlo. Y ya está, una receta facile e divertente con inmejorable resultado.

Ahora ya depende de la mano de cada cual ante los fogones para disfrutar de un plato sabroso... o tirarlo a la basura por incomible. En mi caso –no es inmodestia, es la simple constatación de la realidad- el éxito está asegurado.