Pues nada, amigos de la música, ahora que Manowar han anunciado su tour de despedida –la batalla final, la han denominado ellos con su épica habitual–, os hablaré de su tercer álbum, el que va justo entre el Into glory ride de 1983 –del que ya os hablé aquí– y el Sign of the hammer de finales de 1984, al que también dediqué una reseña en el pasado. Grabado en únicamente seis días en los Phase one studios de Toronto –que tampoco es una gran hazaña que digamos aunque todo un hito si tomamos como base lo que hoy en día tarda cualquier banda de tres al cuarto en grabar un álbum–, supone un homenaje de la banda al país que los unió como grupo.
Así, producido por Jack Richardson para Music for Nations en lo que supondría el último disco para ellos antes de su breve fichaje por 10 records, en Hail to England encontramos el line up clásico de Eric Adams a la voz, Ross The Boss a la guitarra y teclados, Joey DeMaio a los diferentes bajos y pedales y Scott Columbus a la batería. El álbum, con portada de Ken Landgraf –dibujante de cómics que había trabajado para DC y Marvel– contiene el siguiente track list:
Blood of my enemies
Each dawn I die
Kill with power
Hail to England
Army of the immortals
Black arrows
Bridge of death
La verdad es que poco hay que contar de un álbum de Manowar en cuanto a las características de sus temas. Fieles a su estilo, todos siguen un mismo patrón. Blood of my enemies tiene un inicio pausado, preámbulo a uno de los alaridos marca de la casa de Adams que sirve de introducción a una canción con coros, guitarras rápidas y ese omnipresente bajo de DeMaio. Each dawn I die es otro tema machacón con protagonismo del bajo, los excesos vocales de Adams y la guitarra de Ross Friedman explayándose en los solos. Kill with power se inicia con Columbus dándole a su batería antes de que DeMaio se marque una cabalgada de las suyas acompañado de The Boss. Adams (Die! Die!) también se luce en esta canción metalera a tope con estupendo solo. De mis preferidas en un disco que se disfruta enteramente. Hail to England es otro estupendo temazo del que poco se puede destacar, la verdad, que como Army of the immortals, invita a mover la cabeza. Metal directo con estribillos pegadizos, base rítmica machacona y potentes solos de guitarra que junto a la voz inconfundible y personalísima de Adams dan forma a la totalidad del cedé. Black arrows es uno de esos solos de bajo de DeMaio chirriantes y excesivos que tiene pasajes fantásticos junto a otros prescindibles. Y por último, Bridge of death el estupendo tema que cierra el disco, lento al principio, con teclados y una voz melódica, antes de pasar a un medio tiempo épico, con un solo fantástico y percusión de campanas. Puro Manowar y un acertado final para el álbum.
En resumen: Blood, wind, steel, ride and kill... be a Manowar fan. Death to false metal! No me digáis que no son entrañables. Para completar la entrada, adjunto una pequeña selección de este cedé más que aceptable aunque, en mi opinión, inferior al que grabarían a continuación.
Sólo soy un piltrafilla que, poniendo de manifiesto un grave problema de egomanía, me permito opinar de todo cuanto se me pasa por la cabeza sin asumir que a) Lo que escribo no le interesa a nadie más que a mi mismo, y b) En general, no poseo los conocimientos necesarios para discernir sobre los temas que trato. Sin embargo, aquí está mi obra. Consultándola, los amantes del ARTE en cualquiera de sus manifestaciones estaréis de enhorabuena. Así, si mis elucubraciones no os interesan lo más mínimo, al menos podréis explayaros con las imágenes.
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