Así es amiguitos, me he deshecho del Chevelle y me he dado un capricho. Os presento a mi precioso Pontiac GTO. Lo uso para conseguir los tesoros, pero no hago carreras con él –para eso ya tengo el Gallardo- porque es un mamotreto, un armatoste lento del que me gusta escuchar su motor pero con el que no tengo opción si mido mis fuerzas con los bólidos tuneados con los que me acostumbro a encontrar en el nivel en el que estoy. ¿Aún no habéis entrado en el mundo on line de Need for Speed?
miércoles, 11 de abril de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Una cafetera...
Cierto, pero un clásico de los muscle cars.
Yo he conducido uno y si, se pasa calor...
Publicar un comentario