Impresionantes y geniales me han parecido las instantáneas de Troy Paiva, un fotógrafo norteamericano que desde los años 70 se dedica a retratar las carreteras secundarias desiertas del sur de los Estados Unidos y desde finales de los 80 lo hace en horario nocturno. Su técnica –depurada durante todos estos años- es única y muy plástica. Sin utilizar programas de edición digital, sólo sirviéndose de flashes, los filtros de toda la vida, iluminación escénica y jugando con largos tiempos de exposición, sus fotografías dedicadas a desvencijados automóviles tienen una poesía que hipnotiza. Os presento hoy algunos de esos trabajos y dejo para más adelante –no me olvido de él- una revisión de su obra dedicada a edificios y arquitectura. Disfrutadlo.
domingo, 24 de abril de 2011
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1 comentario:
Hipnotizantes... magnifico!
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