Este viernes os voy a presentar al californiano –aunque reside y trabaja en Nueva York- Kehinde Wiley, un pintor y fotógrafo que fusiona la cultura hip hop y el black pride extraído directamente de las calles de Harlem con el clasicismo más absoluto en cuanto a retrato se refiere. Así pues, morenos y negros del barrio se convierten en protagonistas de fotografías o pinturas en las que adquieren el grado de reyes o miembros de la nobleza de siglos pasados.
viernes, 10 de diciembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Muy original, y muy guapo lo que hace Kehinde...
Veo solo orgullo...
exceso...
Publicar un comentario