domingo, 19 de enero de 2014

Capitán Phillips


Amiguitos, la verdad es que el argumento de Capitán Phillips no es que me llamase demasiado la atención. Basada en una novela y a su vez en un hecho real, con una historia sin misterios ni demasiada acción, la cinta parecía el típico vehículo aburrido de lucimiento para Tom Hanks, la excusa para mostrar en la pantalla sus dotes de interpretación y conseguir alguna nueva nominación al Oscar, que siempre va bien para la carrera de uno. Sin embargo, la falta de opciones y el carácter familiar de la propuesta, me hicieron decidirme por esta película dirigida por Paul Greengrass y protagonizada –como ya os he dicho- por el amigo Hanks. La historia que Capitán Phillips nos cuenta es la del secuestro de la tripulación del Maersk Alabama, un carguero de contenedores que en la primavera de 2009 fue abordado a la fuerza por piratas somalíes. 


Y piltrafillas, esto es todo. No hay mucho más que contar porque no pasa demasiado más en toda la cinta. Con dos escenarios principales de reducido volumen y complejidad argumental cero, la dificultad radicaba en hacernos permanecer atentos –Greengrass lo ha conseguido, la película es tensa hasta el agobio- y que Hanks nos regalase un personaje creíble que supiese transmitirnos su estado de ánimo. El resultado es satisfactorio, aunque la visión heroica que del capitán se ofrece no parece ser del agrado de los miembros reales de la tripulación. Sin embargo, los cinco mil dólares que recibió cada uno después de firmar un acuerdo de confidencialidad ayudaron a diluir un poco las quejas que suscitó la imagen que de Phillips se ofrece. El final es emotivo y debo deciros que me ha hecho pensar en los tripulantes del Alakrana, pesquero español que también sufrió un duro secuestro pocos meses después que el Maersk Alabama. Me hago una idea de lo que debieron pasar aquellos hombres, lejos de sus familias sin saber si iban a vivir un día más y se me encoge el alma. Solo por eso, porque en realidad ha habido muchos capitanes Phillips que casi no conocemos, vale la pena echarle una ojeada a esta película.

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