lunes, 20 de junio de 2011

Richardus EPÍLOGO

Epílogo




Marzo de 2007

En su casita de Jaffa, el viejo Ben Hadad Waitzmann recibió, un soleado martes, una postal sin remitente. En el anverso se podía ver una impresionante imagen desde el aire de la catedral de Colonia. En el reverso, en donde podía advertirse la desleída marca de un matasellos de Hamburgo, solo había una frase. Danke schön.
Al leerla, el judío sonrió satisfecho. Luego abrió el armario de la cocina y cogió dos tazas. Les pasó un paño y sirvió café recién hecho en las dos. Entonces abrió la puerta de casa y cruzó el jardín, dispuesto a salir a la calle. Al otro lado de ésta, un nervioso novato observaba sin poder reaccionar como aquel hombre se le estaba acercando.
- ¿Quieres uno? –Ben Hadad le ofreció la taza hablándole a través del cristal. El agente bajó la ventanilla.
- ¿Como dice?
- Que si quieres un café –repitió el anciano funcionario del Estado.
El joven que no recordaba qué era lo que le habían enseñado que debía hacer o decir en un caso como este, asintió.
- Lo ha conseguido, ¿sabes? –le dijo Ben Hadad al joven.
- ¿Perdón? –preguntó éste.
- Déjalo –dijo satisfecho, y se despidió asegurándole que regresaría más tarde para recoger la taza.

Cuando Ben Hadad entró en su hogar, el novato subió de nuevo la ventanilla y se dispuso a beber poco a poco su café. Desconcertado por completo, decidió que no informaría de aquel extraño episodio. Además, no tenía ni idea de quien era aquel viejo al que le habían ordenado vigilar. A lo mejor era el familiar de alguien del Gobierno o un antiguo terrorista al que se debía proteger por alguna razón. En ambos casos era mejor no dar demasiada información de lo que acababa de pasar, no fuese que al final se las cargase él por culpa de las tonterías de aquel viejo. Qué ganas tenía de ser relevado y marcharse a casa.



FIN




He de decir que he estado en Alemania en varias ocasiones, aunque nunca he pisado el Harz. Por eso quiero agradecer a www.todotrenes.com -una página que visité hace años- la información del trayecto hasta la cima del Brocken. Por otra parte, debo advertir que esta novela está llena de datos inventados, datos reales que se han introducido en la trama adecuándolos a esta, situaciones irreales aunque verosímiles y –cómo no- un montón de inexactitudes. Sin embargo, ¿no están llenas de estas últimas la mayor parte de las obras de todo un best seller como Dan Brown?, pues digo yo que en un aficionado como yo estarán aún más justificadas. Finalmente quiero agradecer su tiempo a aquellos -¿hay alguien realmente?- que hayan tenido la paciencia de leer por completo cada uno de estos capítulos. Con toda seguridad, la culpa de que la mayoría no lo haya hecho es mía al ser incapaz de mantener su interés.

4 comentarios:

Lai dijo...

Finalmente quiero agradecer su tiempo a aquellos -¿hay alguien realmente?
Nada hombre, de nada, ha sido un placer

Lai dijo...

Espero con fruición su próxima novela.

King Piltrafilla dijo...

Ja ja ja, ¡pues ya ve usted que es el único!... y eso contando con que diga la verdad y sea un adulador de esos que critica el nexus6.

Ya le aviso que la siguiente no es nueva. De hecho, es más antigua que esta, que ya tenía unos añitos.

Pero gracias por estar ahí.

Lai dijo...

Adulador?
yo?
Si este blog es la quintaesencia del universo!
Por Dios!
La Virgen!
Y los santos apóstoles!