Acabo ya con James Hollingsworth, un pintor hiperrealista norteamericano que inició una carrera como mecánico de aviación antes de entrar a trabajar en el estudio de un diseñador gráfico cansado de unas condiciones de trabajo demasiado duras. Allí descubrió sus innatas aptitudes para el arte. Pero tras montar un negocio que no funcionó y ya casado decidió –siguiendo los pasos de su esposa, quien tenía un trabajo estable- estudiar enfermería, gracias a lo que en unos años consiguió empleo en un hospital. Sin embargo, cuando alguien tiene talento acaba por aflorar y cuando James vio como el tiempo que dedicaba a la pintura pasaba de ocuparle algunas noches a llenar sus fines de semana decidió a finales de 2005 convertir su hobby en trabajo a tiempo completo. En la actualidad sus obras constan en colecciones privadas de los Estados Unidos y varios países en Europa y Asia.
domingo, 13 de febrero de 2011
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5 comentarios:
Aquí hay mucho, mucho talento, los zapatos, las patatas fritas...
genial, realmente genial.
¿A que sí?, me alegro de que le guste. Me ha encantado oiga.
A visto como nunca es tarde?? Tendremos que tomar ejemplo...usté con la fotografía casi casi lo está consiguiendo....
Nunca he sido amante del hiperrealismo, siempre me gustó que se notase la huella del pintor y de su pincel pero es innegable que tiene una técnica cojonuda.
Muy bueno.
Muy guapas.
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