sábado, 30 de julio de 2011

Lluvia


¡La que ha caído en Barcelona amiguitos! Eran las cinco de la tarde y parecía que fuesen las nueve de la noche. Vaya temporal. Rayos, truenos, una ventolera enrabiada, pedrisco, un aguacero que ocultaba los edificios próximos... en resumen, una típica tormenta de verano que sin embargo ha tenido lugar en un verano nada típico para mi ciudad. Así es, porque se auguraba muy cálido pero -de momento- no lo está siendo, algo que por supuesto agradezco. Por cierto, que mientras intentaba publicar esta entrada se me ha desconectado dos veces el ordenador a causa de sendas bajadas de tensión, algo que en pleno siglo XXI a la que caen cuatro relámpagos sigue ocurriendo de manera demasiado frecuente en Barcelona. 

No hay comentarios: