Inauguro las acostumbradas reseñas del día con Morgana –también conocida como Blonde Heaven-, peliculilla erótica de vampiros dirigida –es un decir- por David Decoteau en 1995, cuyo principal y acaso único atractivo sea contar con Julie Strain como protagonista en el que era el mejor momento de su carrera –aquí podéis encontrarla en algunas producciones de Andy Sidaris- así como la aparición de otra erotic scream queen mítica como es Michelle Bauer, a quien conocí en la mucho más interesante y recomendable Hollywood chainsaw hookers de la que os hablé en este espacio. En esta Morgana, se nos cuenta la historia de Angie, una jovencita de Oklahoma que trabaja de camarera en Hollywood mientras intenta hacer carrera como actriz –viva los estereotipos- y cae en las redes de la agencia de señoritas de compañía Blonde Heaven, que en realidad da cobijo a una hermandad de vampiros liderada por la poderosa Illyana.
Pero Kyle, el novio cowboy de la chica –más clichés-, acudirá a su rescate. Para ello contará con la ayuda de Pluto, un cazavampiros que es presidente del club de fans de Amanda Blackwell, actriz especializada en cine de terror que, en realidad, también es una vampira. En fin amiguitos, tal como os he dicho, esta película de bajo presupuesto y patético guión sólo gustará a erotómanos sin remedio, frikis amantes del cine más casposo y seguidores de una Julie Strain que –nunca pensé que diría algo así- me ha resultado más atractiva vestida que desnuda. Obviando todo esto, Morgana es cine basura con un argumento estúpido como mera excusa para encadenar unas cuantas escenas softcore. El final –que no os desvelaré, tendréis que ver la cinta- es de los de traca.
Como bonus os compaño una icónica imágen de Michelle Bauer en la más entretenida y recomendable Hollywood chainsaw hookers que os he comentado al principio.
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