domingo, 11 de noviembre de 2012

Dieting (again)


Pues sí piltrafillas, ya estoy a dieta una vez más. Y, por desgracia, el número que hace unos días aparecía en la pantallita de mi báscula no era este tan demoníaco y rockero de la imagen, sino el doble. Bueno, por desgracia tampoco, que si a mis 1,85 metros pesase 66.6 kilos estaría más muerto que vivo. 
Total, que he decidido hacer régimen. Tampoco os contaré cada día los avances –o retrocesos- que vaya haciendo, pero hoy tengo ganas de dejar por escrito la evolución de esta primera semana de sacrificio, más que nada para darme ánimos ahora que aún sirve de algo que pase hambre y no me he estancado en los 127 kilos, que es donde supongo que mi cuerpo dejará de perder peso y yo me cabrearé y tiraré la toalla y comenzaré a comer de nuevo con más ansia si cabe y volveré a engordar y... 
en fin, lo que os decía, que las lecturas de la báscula desde que comencé la dieta han sido 133.3-132.5-131.8-131.5-130.9 

Deseadme suerte.

3 comentarios:

desdeAndorra... dijo...

Mucho ánimo!
Creo que pocas cosas me costaría más dejar que la comida así que me parece admirable.

En mi caso mi problema no es de sobrepeso, 73 y 1,80, pero mi gran amiga la hipercolesterolemia de alto componente genético me acompaña cada día. Sobretodo cuando me tragino una buena fabada de mi tierra con dedo y medio de capa de grasa en la superficie.

King Piltrafilla dijo...

No me hable de fabadas. Siendo usted asturiano -supongo, por sus palabras- me tildará de sacrílego, pero la Litoral me encanta.

Eso sí, me hago -hacía- un potaje de alubias que no tiene nada que enviadiarle.

En cuanto al colesterol, prefiero no preguntame por él, ni por la tensión, ni por el azúcar, ni las transaminasas... hace doce años que no me hago un análisis ni piso una consulta médica. En esos sitios siempre te encuentran algo.

Lagarto, lagarto.

desdeAndorra... dijo...

Que va! si los de Litoral tienen un producto de lo más logrado.

He de confesar, así entre usted y yo, que cuando se nos acaban las existencias de productos asturianos de difícil acceso en este estanco con bandera, me trajino (esta vez con "j") alguna lata de éstas, quedándome tan a gusto.

Creo que aún se cocina y enlata en Asturias, que digo yo algo tendrá que ver.

En su próximo potaje cambie la butifarra negra por una morcilla asturiana, que seguro que en Barna se encuentran, y verá la diferencia, en mi humilde mejor combinación con las alubias.

Doce años igual es mucho, ¿no?. Hace usted igual que mi abuelo... D.E.P.

Ahora sí lagarto, lagartón.