La elección cinematográfica de hoy es Redacted, de Brian De Palma. Tomando como base un hecho real –la violación y asesinato de una joven iraquí de 14 años por parte de varios soldados del ejército norteamericano en Marzo de 2006-, la cinta nos muestra el día a día de un grupo de hombres destinados en un puesto de control, las vidas de varios soldados de diversa procedencia, nivel cultural y catadura moral, que se desenvuelven entre la violencia y el temor.
Más que una película bélica, nos encontramos con algo más parecido a un documental. Y si muchas veces la mayoría de los directores norteamericanos que han tratado el tema de la guerra –sea esta u otra- se han podido clasificar en dos grupos diferenciados como son los defensores a ultranza del ejército y sus métodos o los que intentan dar una visión objetiva del conjunto sin tomar partido ni juzgar los hechos, con Redacted no se han dado ni uno ni otro caso. Aquí De Palma se decanta claramente por la población inocente que sucumbe ante los desmanes y abusos de ciertos individuos que –amparados en un supuestamente legítimo sentimiento de venganza por los compañeros caídos- llevan demasiado lejos sus ansias de hacerle pagar a alguien sus frustraciones. No ha sido una película divertida de ver. De hecho, tampoco es que me haya contada nada que no supiese o que no se imagine ya todo el mundo a estas alturas. Pero creo que es necesario que –aunque no aporte nada- haya directores de cine que, desde Hollywood -cuna de Rambos y similares-, cuenten estas cosas. De toda la cinta, quizás el minuto 76'07 sea lo más cercano a lo que De Palma ha querido decir con el resto del metraje.
Más que una película bélica, nos encontramos con algo más parecido a un documental. Y si muchas veces la mayoría de los directores norteamericanos que han tratado el tema de la guerra –sea esta u otra- se han podido clasificar en dos grupos diferenciados como son los defensores a ultranza del ejército y sus métodos o los que intentan dar una visión objetiva del conjunto sin tomar partido ni juzgar los hechos, con Redacted no se han dado ni uno ni otro caso. Aquí De Palma se decanta claramente por la población inocente que sucumbe ante los desmanes y abusos de ciertos individuos que –amparados en un supuestamente legítimo sentimiento de venganza por los compañeros caídos- llevan demasiado lejos sus ansias de hacerle pagar a alguien sus frustraciones. No ha sido una película divertida de ver. De hecho, tampoco es que me haya contada nada que no supiese o que no se imagine ya todo el mundo a estas alturas. Pero creo que es necesario que –aunque no aporte nada- haya directores de cine que, desde Hollywood -cuna de Rambos y similares-, cuenten estas cosas. De toda la cinta, quizás el minuto 76'07 sea lo más cercano a lo que De Palma ha querido decir con el resto del metraje.
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