El caso de esta mujer –no muy conocida desde el punto de vista artístico- es interesante. Al igual que el conocido y respetado Wyeth, Donna Nadeau nació en un pueblo de Maine. A los 18 años dedicó los meses de verano a posar como modelo para diversas asociaciones artísticas del sur del estado. Más tarde, enamorada de lo que había visto hacer a los pintores y dibujantes que la tenían de modelo, cambió los posados por clases de arte.
Sin embargo, a los 22 años se convirtió en madre y, buscando cierta estabilidad económica, se vio en la necesidad de encontrar trabajo. Su belleza y –como se recoge en su web- su alegría de vivir la llevaron a ocuparse como bailarina de striptease en clubs de toda Norteamérica. Tras 20 años haciéndolo, decide un buen día aplicar sus conocimientos de pintura y comenzar a reflejar escenas de la que ha sido su vida hasta el momento pintando acuarelas. En la actualidad reparte su vida entre Maine y Florida, realizando exposiciones de gran éxito en ambos estados.
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