Ahora, después de estos fotógrafos a los que –sin restar talento- podríamos definir como lúbricos, llega a este espacio todo un artista llamado Andreas Heumann. Alemán de nacimiento, creció en Suiza en donde entró en contacto con los pinceles y los colores. Y aunque siempre había querido ir a Florencia a estudiar pintura, acabó viajando a Londres, París y Nueva York para desarrollar su interés por la fotografía. En la actualidad se dedica a la publicidad, con trabajos en su haber para compañías como Baileys, Nike, Lufthansa, Clairol, Esso, Smirnoff o Volkswagen. Sin embargo, Heumann nunca abandonó la pintura, llevando a cabo una obra muy personal que cultiva aún hoy día. Os acompaño una imagen de uno de sus óleos, pero huelga decir que a mi –y a numerosos coleccionistas y museos- me gusta mucho más su faceta como fotógrafo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario