Gian Paolo Tomasi es otro de esos artistas que aúnan clasicismo y modernidad. Nace en Milán hace casi cincuenta años y sin cumplir los 20 entra en un prestigioso laboratorio fotográfico de la ciudad como asistente. En 1983 crea una compañía especializada en el duplicado de imágenes y cinco años después –recién cumplidos los 30- años patenta un innovador proceso de impresión que rápidamente utilizarán los más reconocidos fotógrafos italianos del momento. En 1993 exporta su sistema a París, trabajando para –entre otros- el gran Sebastiao Salgado. Un año más tarde se traslada a Nueva York, en donde trabaja con estrellas de la talla de Penn, Avedon o Leibovitz. Es autor de unas preciosas obras en las que mezcla pintura con fotografía insertando modelos en obras clásicas de la pintura o convirtiendo a celebridades en los protagonistas de escenas clásicas.
viernes, 15 de agosto de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario