Bueno amiguitos, regreso de vacaciones -no me he convertido en una estadística- y me encuentro con que el este de Europa está algo revuelto. Y se me ocurre una reflexión. Imaginaos, queridos piltrafillas, que los catalanes –ayudados con fondos del Gobierno francés- nos dedicamos a tomar unilateralmente decisiones político-económicas que tengan por finalidad conducirnos a la independencia o separación del Estado español a la par que organizamos una estructura militar contrapuesta a las fuerzas y cuerpos de seguridad del país. Lo más natural es que –además de utilizar la vía del diálogo- el Estado envie un par de tanques a la Avenida Diagonal de Barcelona.
Pero imaginaos entonces que los franceses, viendo esto –con el pretexto de que los catalanes del sur, hermanados con los catalanes del norte que forman parte de Francia, están siendo amenazados-, envían tropas, tanques y aviones a España y no sólo luchan contra el ejército español en Catalunya sino que arrasan ciudades de Zaragoza y Ciudad Real. Además –como los separatistas del País Vasco aprovechan la mínima oportunidad para ir contra el Gobierno central-, un buen número de tanques y tropas francesas entran en Euskadi con la ayuda de su población, desde donde acceden a zonas de Castilla. ¿Qué pensáis que diría el Gobierno de España?,¿qué creéis que demandaría nuestro país a las Naciones Unidas –ese estamento inútil- o a la OTAN?
Pues bien, cambiad España por Georgia, Catalunya por Osetia del sur, Euskadi por Abjazia y Francia por Rusia. Ah, que no es lo mismo. Claro, porque ¿donde coño está Georgia?, muy lejos ¿verdad?, no nos afecta mucho lo que pase allí. Somos un país que ha ayudado a invadir Irak, que tiene tropas en Afganistán no se sabe muy bien con que fin o utilidad..., pero ¿Georgia? Además, los rusos son demasiado fuertes y... en teoría son amigos, ¿no?
Así pues, con la boca pequeña, los Estados Unidos, Francia y los ineptos de la ONU entre otras voces, reñirán a Putin y sus ejercicios neoimperialistas, pero nadie moverá un dedo para defender realmente a Georgia y castigar ejemplarmente a Rusia. Lo malo de todo esto es que, como siempre, los fallecidos, los masacrados, los deshauciados... son el pueblo llano. Los que mandan siguen pasando sus vacaciones en residencias de verano.
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