En las afueras de la ciudad

Ahora os hablaré de En las afueras de la ciudad, película chilena de 2013 dirigida por Patricio Valladares de la que el mismo realizador estrenó un remake en Hollywood un año más tarde. Protagonizada por Daniel Antivilo, Siboney Lo y Carolina Escobar, la historia que la cinta nos cuenta es la de Ana y Anny, dos hermanas que han crecido aisladas en una casa perdida en medio del campo en las afueras de una gran ciudad junto a su padre alcohólico, asesino y abusador y Manuel –algo que no aparece en las sinopsis publicadas-, un fruto de su relación incestuosa al que años atrás este fue incapaz de matar y que tiene metido en un cobertizo como si de una alimaña se tratase. Sin embargo, cuando el degenerado viola a la pequeña, la hija mayor decide denunciarle. Pero al aparecer los policías, Felipe –que así se llama el tipo- mata a a los agentes. Entonces pide ayuda al narcotraficante al que le guarda la droga y este de da dinero para que desaparezca por una temporada. Claro que el tal Felipe es un elemento de cuidado y no tarda en asesinar a un inocente y dar con sus huesos en prisión. Las chicas y el asalvajado Manuel se quedan solos por lo que Ana decide abandonar la casa y dirigirse a una cabaña en las montañas, un lugar rodeado de bosque que años antes le había mostrado su padre y que utilizaba como almacén de la droga que custodiaba. 

Una vez allí, Ana consigue dinero ejerciendo la prostitución en un pueblecito cercano mientras Anny y Manuel se esconden del mundo. Sin embargo, la súbita aparición de un par de excursionistas pondrá al descubierto la peculiar naturaleza de las hermanas, una parte de ellas que se esforzaban por esconder. Mientras tanto, los hombres de Tío Costello siguen la pista de las muchachas con el fin de encontrar vario kilos de droga del alijo que Felipe custodiaba y que no han aparecido. Piltrafillas, En las afueras de la ciudad es una especie de mezcla de slasher, película de narcos y exploitation del género rape and revenge. Incesto, canibalismo, sexo, sangre, violencia gore y una fotografía cruda, polvorienta, calurosa y opresiva que a ratos recuerda –incluso por alguna imagen, ya veréis- a The Texas chainsaw massacre. Cargada de escenas desagradables y con interpretaciones que dejan mucho que desear, pese a tratarse de una cinta de serie Z con un guión algo deslavazado, ofrece las suficientes imágees desagradables y sin tapujos que todo amante de las cintas de horror extremo espera. Muy entretenida.