La mujer murciélago

Amiguitos, completo mis reseñas de hoy con Batwoman, cinta de 1969 dirigida por Ray Cador y protagonizada por Maura Monti, Robert Cagney, Dave Silver y Cris Alvard. ¿Una producción norteamericana basada en el personaje de la DC? Bueno, la verdad es que la realización es del mexicano René Cardona y los protagonistas masculinos mencionados son Roberto Cañedo, David Silva y Cruz Alvarado, pero en una cosa habréis acertado, es una burda copia de la cinta norteamericana protagonizada por Adam West basada en el personaje de Batman pero cambiándole el sexo para que pueda ser interpretado por la guapa Maura Monti, actriz italiana de familia acomodada afincada en Venezuela que en los años 60 se trasladó a Mexico para trabajar como modelo y actriz, lo que gracias a su belleza no le fue difícil de conseguir. Así que en La mujer murciélago nos encontramos con una historia de Alfredo Salazar –autor del guión de numerosas cintas del género de luchadores y precursor del cine de terror mexicano- que nos cuenta como tras una serie de asesinatos de luchadores en Acapulco, las autoridades piden la ayuda de La mujer murciélago, una bella y rica joven que –además de tener una extraordinaria puntería- domina diversos deportes como la equitación, el submarinismo o la lucha libre y ha puesto su fortuna al servicio de la justicia. Impagable es su llegada a Acapulco desde el D.F. capitalino aterrizando en la playa ataviada con máscara y capa de Batman y un sucinto bikini. 

Total, que gracias a las pesquisas de La mujer murciélago, rápidamente se identifica al culpable de las muertes. Se trata del Doctor Williams, quien desde su base en el barco Reptilicus lleva a cabo experimentos grotescos con el objetivo de crear un hombre anfibio, cruzando seres humanos con peces y escogiendo a luchadores por su excepcional condición física. Se da la circunstancia de que a sus víctimas les extrae la glándula pineal –que produce melatonina, la hormona inductora del sueño-, que no tiene relación científica real con el experimento pero que queda lo suficientemente friki en el guión para que en boca de un doctor loco quede creíble. En fin amiguitos, La mujer murciélago es un fabuloso exponente de serie Z casposa y cutre en el que destaca una banda sonora de jazz –algo que nos recuerda algunos títulos del añorado Tío Jess-, con un montón de imágenes submarinas, una persecución automovilística, un monstruo que es algo así como una mezcla de la Criatura del lago negro y el Inframan chino del que os hablé hace unas semanas aquí y que sirve como vehículo de lucimiento físico para la Monti, una heroína que lucha sobre la lona con traje de Batman completo pero combate el crimen en bikini. Por supuesto, tal homenaje kitsch al personaje creado por Bob Kane está más que recomendado por este que os escribe.