Esta, piltrafillas, es Lili Saint Cyr, la Reina de las strippers en la Norteamerica de los 50, una bella mujer que rivalizó en popularidad con la carismática Bettie Page, todo un icono al que preferiré siempre de entre todas las pin-up y bailarinas exóticas de burlesque de aquella época.
Sin embargo, en el arte de quitarse la ropa con elegancia y sensualidad, Lili era insuperable. La guapa joven llegó a Hollywood con muchas ilusiones, un cuerpo perfecto y estudios de ballet. Pero después de trabajar como chica de coro y ver que tal ocupación no daba para comer, probó fortuna en el floreciente mundillo del striptease. Y alcanzó el estrellato. A mi –que no viví aquello y hablo de oídas- me ha gustado la foto, eso es todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario