Inicio el día con Eva Rubinstein, una fotógrafa polaco-argentina nacida en Buenos Aires por accidente, cuando su madre, bailarina, acompañaba a su padre –el internacionalmente reconocido Arthur Rubinstein– en su gira de conciertos sudamericana de 1933. Criada en París, al comenzar la Segunda Guerra Mundial se estableció con su familia en los Estados Unidos.
Eva se formó en arte dramático y trabajó como actriz y bailarina, pero a finales de los años 60, madre de tres hijos y a punto de divorciarse, se interesó por la fotografía asistiendo a talleres de Diane Arbus, lo que finalmente la llevó a convertirse en fotoperiodista y a desarrollar una faceta más personal y creativa en la que no faltaban desnudos, paisajes o evocadores interiores.
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