domingo, 17 de septiembre de 2017

I lunghi capelli della morte (1964)


Mi segunda reseña es para I lunghi capelli della morte, una película de horror gótico de Anthony Dawson basada en un argumento de Julian Berry –o lo que es lo mismo, dirigida por Antonio Margheriti y escrita por Ernesto Gastaldi–, que cuenta con la icónica Barbara Steele como protagonista. Tal y como un letrero nos indica al pincipio de la cinta, la historia tiene lugar a finales del siglo XV y nos muestra como Adele Karnstein está a punto de ser ajusticiada por brujería y acusada de asesinar al hermano del Conde Humboldt. Una mujer logra eludir la vigilancia del castillo y llega hasta el Conde, pidiendo su ayuda para detener la ejecución ya que –sin decir nombres– afirma poder demostrar que quien mató a su hermano es alguien de su confianza y no la mujer que van a quemar viva. Pero el Conde está más por la labor de disfrutar de los encantos de la joven Helen Rochefort que de hacer nada por una supuesta bruja, por lo que –mientras aquella es devorada por las llamas ante su hija pequeña Lisabeth– fuerza sexualmente a Helen, lo que no le impide oír cómo antes de fallecer, Adele grita su maldición para él y sus descendientes. 


Al día siguiente el Conde asesina a Helen tirándola al río. Cuando la encuentran, entierran su cuerpo en los jardines del castillo y la cuidadora de Lisabeth le confía un secreto: ha echado en la misma sepultura las cenizas de su madre. El tiempo pasa y la pequeña se convierte en una atractiva joven a la que pretende el Baron Kurt Humboldt. Amiguitos, I lunghi capelli della morte es una estupenda película con apariciones, pasadizos secretos, decorados góticos, tumbas y epidemias con una estética muy atractiva en blanco y negro en la que Margheriti hace un trabajo notable y donde, además de la mencionada Steele, destaca el trabajo de la polaca Halina Zalewska y de actores como Giorgio Ardisson o los veteranos Nello Pazzafini y Giuliano Raffaelli, aquí actuando con sus pseudónimos internacionales John Carey y Jean Rafferty. En resumen, una cinta de lo más recomendable.

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