Mi primera reseña de hoy es para la reciente Paranoia, cinta realizada por Robert Luketic, que como única película destacable en su haber –es mi opinión- tiene a la interesante 21: Blackjack, que ya pasó en su día por este blog. Lo que nos cuenta el argumento es la historia del joven e inteligente Adam, de origen humilde, huérfano de madre y con un padre enfermo, empleado en una empresa de comunicaciones en la que desea ascender. Para ello trabaja junto a su equipo de jóvenes cerebritos en una idea que debe presentar ante el mandamás de la compañía, Nicholas Wyatt, que no solo no le hace ni caso sino que le echa de la empresa. Esa noche, el grupo se gasta su asignación para proyectos en un carísimo club de la ciudad. Total ¿qué va a hacer Wyatt si se entera, despedirles otra vez?
Pero Wyatt sí se entera y lo que hace a la mañana siguiente es amenzarle con poner una denuncia federal si no acepta ponerse a su servicio y entrar en la compañía de su competidor y antiguo compañero Jock Goddard para robarle sus secretos. Adam no lo ve claro, pero no tiene dinero para cubrir los tratamientos de su padre y tampoco quiere acabar como él, enfermo y pobre después de treinta años como vigilante. Así pues, el chico traiciona a sus principios y consigue captar el interés de Goddard. Un trabajo bien remunerado, la confianza del presidente de la empresa, deportivos descapotables, el amor de una bella joven... todo ayuda a sobrellevar la mentira hasta que su vida comienza a estar en peligro.
Y como bonus, un retrato de la guapa Amber insinuando sus dotes interpretativas, dos para ser exactos.
A ver que cuente... una... y dos.
ResponderEliminarSí, exacto, son dos muy buenos talentos.
De Oscar.
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