jueves, 29 de agosto de 2013

Estación internacional de Canfranc Parte II


Este verano, el Ayuntamiento de Canfranc ha decidido abrir el vestíbulo de la antigua estación de ferrocarril al público -ver anterior entrada-, todos los días, en varias visitas con guía al precio de 3,00 euros. La previsión era de tener unos mil visitantes el primer mes. Pues bien, en seis días se llegó a esa cifra. Debo deciros que me presenté en Canfranc sin avisar a las doce del mediodía de un sábado y ya no quedaban plazas ni para las 12:30, ni las 17:00, ni las 18:00 ni las 19:00 horas, teniendo que hacer una reserva telefónica posteriormente, lo que me obligó a regresar a la localidad dos días después. Pero valió la pena. La visita y lo que la guía nos contó fue de lo más interesante, sin embargo, a los amantes de la fotografía os diré que –pese a los carteles de NO PASAR que encontraréis por todo el recinto- lo más interesante es deambular entre las vías y las antiguas estructuras en ruinas para encontrarse con restos de vagones engullidos por la vegetación o dormidos en una espera infinita. 


Total piltrafillas, que en estas dos tandas de la serie dedicada a la Estación Internacional de Canfranc habéis podido encontrar instantáneas, tanto del interior de parte del edificio principal –solo se ha restaurado la cubierta y el paso subterráneo, quedando pendiente todo lo demás- como de los andenes y extensos muelles de carga que nos dan una idea de lo majestuosa que en su etapa de pleno rendimiento debía parecer una estación que –de momento- resiste cual extraña pieza arqueológica de metal, cemento y madera siendo un imán para amantes de las estampas ferroviarias y un recuerdo familiar para los habitantes de Canfranc, algunos de los cuales habían asistido a la escuela o al dispensario médico en su recinto.

4 comentarios:

  1. Siempre me han atraído las estaciones de tren, tienen algo mágico, romántico... todo lo contrario las estaciones de autobús :(

    ResponderEliminar
  2. Me pasa lo mismo con las estaciones -le recomiendo las vías muertas de la de Canfranc, sin duda-, pero en lo de los autobuses discrepo. Hay de todo. A mi me encantaría coger un GREYHOUND en alguna estación vetusta del midwest estadounidense.

    ResponderEliminar
  3. Si estuviera usted en la indecorosa red faceb--k, le pincharía sucesivas veces al me gusta me gusta

    ResponderEliminar
  4. Qué honor. Pero también puede retuitearme repetidas veces. ;D

    Celebro que mis entradas sean de su agrado.

    ResponderEliminar