domingo, 10 de abril de 2022

Cristiana monaca indemoniata (1972)


La reseña de hoy es para Cristiana monaca indemoniata, una intrascendente peliculilla italiana de nunsploitation escrita y dirigida por Sergio Bergonzelli y protagonizada por Toti Achilli y Magda Konopka, entre otros. Tras unos patéticos títulos de crédito entre las ruinas de la Acrópolis ateniense, la historia comienza con Cristiana y su novio Luca follando en un avión a la vista de todos los pasajeros en medio de un vuelo de Atenas a Roma. De pronto, la aeronave atraviesa una tormenta y un rayo incendia uno de sus motores, lo que –tal como nos muestran los vergonzantes efectos visuales con imágenes de una maqueta detrás de una cortina de agua– provoca su caída en picado. Cristiana se asusta tanto que, abrazada a una escandalizada monja, promete a Dios que si la salva de morir, abandonará su vida disoluta y tomará los hábitos. Y dicho y hecho. Dios hace el milagro y Cristiana entra en un convento. Pero claro, un espíritu libre y carnal como el de Cristiana no tarda en sentirse angustiado entre las paredes del convento, algo que no escapa al buen ojo de la Hermana Eleonora. 
 

En fin, que como ya he comentado al principio, opino que en general se trata de una obra menor del género –por cierto, tuvo su versión X habitual en esos años gracias a diversos insertos de sexo real– y no creo que Cristiana monaca indemoniata pase a la historia como un exponente de la nunsploitation. Aún así, resulta entretenida y Toti Achilli aparece convincente en su interpretación de las diferentes etapas por las que Cristiana pasa, transitando del hedonismo a la fé, la duda y el remordimiento. Además, se aparta de lo que sería un simple vehículo para mostrar escenas lésbicas y subidas de tono entre los muros de un convento dando relevancia a la parte emocional de la protagonista. Y exceptuando los efectos visuales de baratillo del comienzo, la verdad es que en el apartado estético me ha gustado bastante. Así pues, no es una pérdida de tiempo dedicárselo a su visión. Hacedme caso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario