domingo, 4 de marzo de 2018

Patti Cake$ (2017)


Y mi segunda cita con el cine es con una película que me ha sorprendido. En efecto, me refiero a esta Patti Cake$ escrita y dirigida por Geremy Jasper, autor también de la música y las letras de los temas de la banda sonora. El argumento se centra en el día a día de Patricia Dombrowski –estupenda la australiana Danielle Macdonald–, una joven de un barrio deprimido de North Jersey que vive con una madre alcohólica que fue vocalista de un grupo de rock en su juventud y con su abuela –la mítica Cathy Moriarty–, convaleciente de una operación de cadera y con alzheimer en primera fase. Patti es la única que trabaja en la familia por lo que las deudas se amontonan. Sin embargo, la chica no se deja vencer por la depresión. Fan de Othello Zeus, la estrella rapera del momento, sus canciones son para ella el refugio que necesita. Cuando le oye cantar, el mundo desaparece, los problemas desaparecen, el barrio desaparece... así que Patti –alias Killa P– quiere ser rapera. Esa joven mujer, blanca, pelirroja y con sobrepeso –en el barrio la llaman Dumbo– tiene un sueño, quiere ser como OZ. El único que la anima es su amigo Jheri, un dependiente de farmacia con el que pasa el rato improvisando rimas y soñando con cruzar el Hudson y convertirse en estrella. Patti tiene un trabajo nocturno limpiando y sirviendo copas en un tugurio de mala muerte, busca trabajo de camarera en una empresa de catering para eventos e incluso acepta cantar en un local de strippers. Lo que sea para hacer realidad su sueño. 


En fin piltrafillas, una de esas cintas que a priori no esperaríais encontrar en este espacio –aunque los que me seguís desde hace años ya sabéis que de tanto en tanto os sorprendo– y que lo cierto es que encuentro de lo más recomendable. Sin grandes complicaciones, con un mensaje claro y retratando a perdedores a los que aún queda un atisbo de ilusión aunque sea a costa de vivir de recuerdos –fantástica también Bridget Everett cantando Kiss me deadly (1)–, es precisamente en su sencillez y optimismo donde radica el encanto de este cuento amable con guiños de humor. Fresca y agradable de ver, Patti Cake$ es la típica historia que habla de perseguir los sueños y ser siempre honesto consigo mismo pero con un enfoque original y un final emotivo. Por desgracia, la vida real no acostumbra a finalizar como un cuento de hadas. Sea como sea, una pequeña joyita que sorprendió en el festival de Sundance del año pasado. 

(1) Bonus que poco tiene que ver con la película y mucho menos con el rap: Pese a haberla popularizado Lita Ford en 1988, Kiss me deadly fue compuesta en realidad por un músico llamado Mick Smiley, que también esccribió un tema para la película Ghostbusters. Se da el caso de que Smiley tocó el bajo para la primera grabación en solitario de Billy Idol en 1981 tras abandonar Generation X –en la batería estaba Frankie Banali de Quiet Riot–, en el tema Mony Mony que apareció en el EP Don’t Stop, que también contenía una versión de Dancing with myself. Esta canción ya había aparecido en el último álbum de los mencionados Gen X titulado –¿casualidad?– Kiss me deadly.

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