Os presento ahora a Mike Cockrill, controvertido pintor formado en la Pennsylvania Academy of the Fine Arts que a finales de los 70 se trasladó a Brooklyn, donde consiguió hacerse un nombre junto a Judge Hughes hasta que a finales de los 80 tomó las riendas de su carrera en solitario. Autor de unas obras figurativas cargadas de sensualidad, es un precursor de lo que a finales del siglo pasado comenzaron a hacer Liza Yuskavage o John Currin.
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