Finalizo el día con las sensuales fotografías de
Vivienne Mok, jovencísima neoyorquina afincada en París. Tras graduarse en diseño de moda y trabajar en ese campo durante algunos años, decidió ponerse tras la cámara y crear las imágenes oníricas que podemos conocer ahora. Esa neblina, esos tonos pastel, esos retratos difuminados cargados de erotismo adolescente... nos remiten de inmediato a los trabajos de
David Hamilton, mítico y –por fin- respetado fotógrafo británico que en su momento despertó gran controversia y sufrió la persecución de ciertos medios de comunicación. En la actualidad su obra ya ha pasado incluso a los museos, algo que quién sabe si en un futuro le ocurrirá a esta discípula avanzada.
Estas son atmosféricas..
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