Ni Halloween ni ostias. En un arrebato de tradicionalismo ante el imperialismo anglosajón os deseo una Bona Castanyada. Hasta mañana amiguitos.
* La castañera asa castañas en un bidón agujereado, póngame una docena en un periódico enrollado.
domingo, 31 de octubre de 2010
Dale O’Dell
Ahora os presento a Dale O’Dell, fotógrafo de Texas que se inició en este noble arte en su adolescencia y que en 1986 abrió su estudio. A mediados de los 90 su traslado a Arizona fue parejo a su paso de la fotografía tradicional a la digital. Ha publicado varios libros, ha recibido múltiples premios y colabora regularmente en numerosos magazines de fotografía.
Julia Blank
De Julia Blank tampoco os puedo contar demasiado. Dedicada a los editoriales de moda y belleza y a la publicidad, ha trabajado para Conde Nast, Novartis, Shiseido, Riani, Jockey o Watchtime. A mi me ha parecido muy elegante y sensual.
Andre König Re-visited
No aportaré más datos de Andre König a los que ya publiqué en mi entrada de 22.08.08 –por cierto, bastante escasos- y sin embargo os ofreceré hoy algunas instantáneas de este fotógrafo con las que ampliar la base de imágenes con las que ilustré la mencionada recomendación sobre su trabajo. Apenas unas cuantas fotografías con las que dar a este domingo un poco de color.
Lars Borges
De variado e interesante puede calificarse el trabajo de este fotógrafo establecido en Berlín –ah, que recuerdos- llamado Lars Borges, un jovencísimo y creativo artista que publica editoriales y retrata a celebridades para diversos magazines y agencias de imagen.
Canelones de marisco
Amiguitos, ni recuerdo ya cuanto tiempo hace que no os ofrezco una de mis recetas así que hoy, celebrando que el fin de semana es largo y se prestaba a pasar tiempo en la cocina, os voy a contar cómo hago mis Canelones de marisco. En realidad es más el nombre que otra cosa, porque los ingredientes son atún en lata y langostinos cocidos –nada de tirar la casa por la ventana-, pero los que tengáis dinerito para gastar siempre podéis utilizar otras materias primas más glamourosas. En fin piltrafillas, prestad atención para otra de mis sencillas aunque deliciosas creaciones.
Lo primero es pelar los langostinos –para dieciocho canelones he cogido veinte, más que nada porque eran los que tenía en el congelador-, reservando las cabezas y cortando en pequeños trocitos las colas para echarlas en una ensaladera. Luego vaciaremos de aceite seis latas de atún en conserva y mezclaremos en la ensaladera bien desmigado el atún y los langostinos.
Lo segundo es hacer una bechamel, algo que a estas alturas no creo que tenga que explicaros. Ya sabéis, en resumen es mantequilla, harina, leche, sal, pimienta –hay quien le echa nuez moscada y brandy- y mucho cariño para que resulte espesita y sin grumos.
Por último lo mezclaremos todo en la ensaladera poco a poco teniendo cuidado de que la mezcla no quede líquida y dejaremos enfríar –mejor que pase toda una noche en la nevera- para que adquiera consistencia.
El siguiente paso es hervir la pasta. Esta vez he probado unas láminas precocidas que no necesitan hervirse y que sólo han necesitado de veinte minutos sumergidas en agua caliente. En este aspecto haced lo que os plazca. Mientras tanto freíremos a fuego lento las cabezas de langostino a las que chafaremos e iremos extrayendo el líquido ayudados con un tenedor o cuchara de madera. Colaremos y reservaremos el aceite de langostino resultante.
En otra sartén sofreíremos un diente de ajo rallado, tomate y orégano añadiendo sal.
Llegados a este punto dejaremos las láminas de pasta descansar sobre el mármol de la cocina o sobre un trapo seco durante un rato para que se sequen. Ya sólo queda rellenar los canelones con la mezcla y disponerlos adecuadamente en una fuente de horno. Alrededor de estos –no por encima- echaremos la salsa de tomate aromatizada y por encima de los canelones el aceite de langostino. Por último espolvorearemos mozzarella y pondremos durante veinte minutos a 200ºC antes de gratinarlos como paso definitivo.
Lo dicho, sabroso, facile e divertente.
Lo primero es pelar los langostinos –para dieciocho canelones he cogido veinte, más que nada porque eran los que tenía en el congelador-, reservando las cabezas y cortando en pequeños trocitos las colas para echarlas en una ensaladera. Luego vaciaremos de aceite seis latas de atún en conserva y mezclaremos en la ensaladera bien desmigado el atún y los langostinos.
Lo segundo es hacer una bechamel, algo que a estas alturas no creo que tenga que explicaros. Ya sabéis, en resumen es mantequilla, harina, leche, sal, pimienta –hay quien le echa nuez moscada y brandy- y mucho cariño para que resulte espesita y sin grumos.
Por último lo mezclaremos todo en la ensaladera poco a poco teniendo cuidado de que la mezcla no quede líquida y dejaremos enfríar –mejor que pase toda una noche en la nevera- para que adquiera consistencia.
El siguiente paso es hervir la pasta. Esta vez he probado unas láminas precocidas que no necesitan hervirse y que sólo han necesitado de veinte minutos sumergidas en agua caliente. En este aspecto haced lo que os plazca. Mientras tanto freíremos a fuego lento las cabezas de langostino a las que chafaremos e iremos extrayendo el líquido ayudados con un tenedor o cuchara de madera. Colaremos y reservaremos el aceite de langostino resultante.
En otra sartén sofreíremos un diente de ajo rallado, tomate y orégano añadiendo sal.
Llegados a este punto dejaremos las láminas de pasta descansar sobre el mármol de la cocina o sobre un trapo seco durante un rato para que se sequen. Ya sólo queda rellenar los canelones con la mezcla y disponerlos adecuadamente en una fuente de horno. Alrededor de estos –no por encima- echaremos la salsa de tomate aromatizada y por encima de los canelones el aceite de langostino. Por último espolvorearemos mozzarella y pondremos durante veinte minutos a 200ºC antes de gratinarlos como paso definitivo.
Lo dicho, sabroso, facile e divertente.
sábado, 30 de octubre de 2010
Ione Rucquoi
Y finalizo el día en lo que a entradas en este blog se refiere con Ione Rucquoi, fotógrafa británica natural de Oxford que en sus obras intenta explorar elementos de la existencia humana tales como la muerte, el cambio o la sensualidad. Con una fuerte influencia de la estética del Renacimiento, sus instantáneas no dejan indiferente al ojo inquieto y curioso de frikis como nosotros. Lleva una década exponiendo con gran éxito por galerías de toda Gran Bretaña.
Vince Fraser
Ahora le toca a Vince Fraser, diseñador británico freelance especializado en ilustración digital, fotomontaje y creación de modelos 3D que ha trabajado para BBC, Nike, Hugo Boss, British Airways o T-Mobile y aparece regularmente en publicaciones como Advanced Photoshop y PC World.
Buick Wildcat II
Sí piltrafillas, ya tocaba hablar nuevamente de una bonita máquina de cuatro ruedas en este espacio. Hoy le ha llegado el turno al Buick Wildcat II, un bello biplaza diseñado por Ned Nichol y Harley Earl a mediados de los 50. Ignoro cuantos ejemplares de este concept car salieron de la cadena de producción -¿acaso uno?-, pero lo cierto es que aún pueden verse por las carreteras de los Estados Unidos.
Roz McQuillan
Y prosigo con Roz McQuillan, dibujante y pintora australiana que define su estilo como realismo influenciado por Degas, Toulouse-Lautrec, Gustav Klimt, Rembrandt o el arte japonés. Ha recibido diversos galardones premiando sus obras... and I like them.