Fieles piltrafillas, os voy a hablar ahora de Rick James, un músico de funk y música disco que tendría ahora 60 años, si no fuese porque falleció en 2004. Bebedor y drogadicto –con antecedentes por maltrato a mujeres-, este poco recomendable individuo supo sin embargo lo que era el éxito, alcanzando el estrellato en los 80 con su canción Super Freak. Y no es extraño, pues el tipo era un friki del tamaño de una catedral. No existe otra explicación para que Rick se prestase a aparecer de esta guisa en las fotos promocionales de esa época de excesos y fama.
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