domingo, 31 de enero de 2010

Leftovers










Por último, después de un tiempo de sequía, el King Piltrafilla os ofrece una nueva tanda de la socorrida serie Leftovers, en esta ocasión varias instantáneas tomadas en Ronda, Prades, Barcelona y Dosrius. ¿Alguien se atreve a identificar los escenarios?. Hasta mañana amiguitos.

Chris Berens









Ahora quiero mostraros parte del trabajo de este interesante pintor neerlandés llamado Chris Berens. Innovador en cuanto a técnica –en lugar de óleo y lienzos utiliza papel fotográfico y tintas-, es autor de una obra enigmática, fantástica caracterizada por la distorsión de imágenes de gran realismo que –en ocasiones- le acercan a un hiperrealismo surreal. Y no, aunque lo parezca, en sus cuadros no hay ni elementos fotográficos ni manipulaciones digitales. Nacido en Oss en 1976, en la actualidad reside en Amsterdam.

Finders keepers, lovers weepers






Para este domingo húmedo y gris en el que la llovizna casi da al traste con mi paseo matutino a la caza de imágenes por la ciudad he escogido una cinta de Russ Meyer –realizador habitual de este blog, aunque ya hacía meses que no aparecía por aquí- titulada Finders keepers, lovers weepers. La película se inicia con un plano del desierto, unos coches a toda velocidad y una mujer bailando con los pechos al aire, todo ello marca de la casa pero con nula relación con el argumento de la cinta que está a punto de comenzar. Es igual amiguitos, así era el tío Russ. Sin darnos cuenta nos encontraremos de pronto en un club de strip-tease en el que una buena cantidad de parroquianos embobados apuran sus copas –atención a la breve aparición hitchcockiana del mismísimo Meyer- mientras acarician con sus ojos las tetas de una bailarina que se contonea al ritmo de la música. Entonces dos hombres llegan al local –la Alfombra roja se llama- y da comienzo la película con unos títulos de crédito muy originales.




Finders keepers, lovers weepers –algo así como “el que lo encuentre que se lo quede y el que lo pierda que lo lamente”- cuenta de una forma amena y muy simple como la amante de Paul, el amo del club antes mencionado, contrata a dos hombres para que roben la caja fuerte del local. Para ello hace que le golpeen cuando la visita en su apartamento con la intención de que se vaya a casa a pasar la noche. Allí tendrá que darle explicaciones a Kelly, su mujer, quien engañada e insatisfecha le dejará dormido y se irá al club para que la consuele el barman. Este acabará seduciéndola e invitándola a su casa propiciando una escena en la piscina que sirvió de reclamo cuando se estrenó la película en 1968. Mientras, los ladrones están en el club intentando abrir la caja fuerte. Pero cuando Paul se despierta, al no encontrar a su esposa, decide ir hacia su local. Las cosas se complicarán cuando Kelly, arrepentida, le pide a su amante que le lleve de vuelta al club. Debo deciros que en esta cinta no encontramos el típico desmadre de humor y sexo al que Meyer nos acostumbró a partir de su siguiente obra –la mítica Vixens- y asistimos a una pequeña película de poco más de una hora que bien podía haber sido un episodio de cualquier serie de televisión estrenada en los 70 en los Estados Unidos como Las calles de San Francisco o Starsky y Hutch, es decir, una historia amena de traición, crimen con un poco de acción y algo de erotismo. En resumen piltrafillas, una recomedable obra –yo diría que menor- del interesante maestro norteamericano de la comedia softporn.

Diego Alborghetti







Le toca ahora a un tal Diego Alborghetti, un fotógrafo afincado en París que se dedica a la publicidad y los editoriales de moda y belleza. Su apellido remite de inmediato a un supuesto origen italiano pero, como ni ese dato tengo claro, dejaré que hablen sus instantáneas.

Grammy Awards


No es que me interesa demasiado esta ceremonia –más bien poco, es decir, nada- pero es que me ha gustado el cartel.

Be a follower

Eric Guillemain






Este es Eric Guillemain, fotógrafo francés que comenzó su carrera artística en París como músico y que –al trasladarse a Nueva York para ampliar horizontes vitales- encontró trabajo como asistente de fotografía. Si exceptuamos los típicos retratos de familia, Eric confiesa que nunca había tomado fotos con anterioridad. Sin embargo, sus compañeros detectaron en él un talento dormido. Así, tras enviar unos cuantos retratos a Surface, Eric comenzó a hacerse conocido lo que le llevó en 2007 a realizar su primer reportaje. Y bueno piltrafillas, ahí está, buscando la foto perfecta.

Paul Outerbridge








Inicio el día con uno de los clásicos, el norteamericano Paul Outerbridge –fallecido a finales de los 50-, un fotógrafo de moda y publicidad que fue pionero en el uso del color y un artista que cultivó una faceta creativa paralela a la puramente laboral. Realizó exposiciones diversas en su país, en Londres o en París, llegando a entablar amistad con maestros como Duchamp o Man Ray.

sábado, 30 de enero de 2010

Franck Wartenberg







Y este es el fotógrafo Franck Wartenberg, un tipo que reparte su tiempo entre Hamburgo, Londres y Nueva York trabajando para diferentes agencias internacionales de publicidad en la realización de campañas para firmas como Absolut, Mercedes-Benz o Nikon. Franck también retrata a celebridades del arte y el espectáculo y publica editoriales en Elle, Stern, Cosmopolitan, GQ o Vanity Fair entre otros magazines.